Cementerio de disidentes 

Hoy abierto a toda la comunidad y renombrado “Cementerio Parque Bosques de Santa Catalina”, el Cementerio de Disidentes de Lomas de Zamora es un sitio patrimonial que se encuentra protegido a nivel municipal por la Ord. Nº 16087. Su valor es tanto paisajístico y arquitectónico como simbólico, por ser el principal enterratorio no católico de la zona donde descansan los restos de vecinos de diferentes épocas y religiones, incluyendo figuras relevantes de la historia local y nacional, siendo además uno de los más importantes sitios de memoria del país sobre los argentinos caídos en la Primera y la Segunda Guerra mundial. Su historia se remonta al siglo XIX, cuando este solar fue parte de la estancia Santa Catalina, luego parte de la quinta Oak Farm de Wilson Jacobs III y finalmente fue adquirido en 1884 por el Ferrocarril de la Provincia para instalar la estación Llavallol de su ramal de La Plata a Cañuelas. En 1890 el ramal pasó a manos del F.C. del Sud, modificando su trazado para utilizar Constitución como cabecera, mudando la estación Llavallol a su ubicación actual y quedando este predio vacante, lo que generó que la creciente comunidad británica de Lomas solicitara al Ferrocarril la donación de las tierras para la creación de un cementerio no católico. El proyecto fue encargado al arquitecto y vecino de Lomas Walter Bassett-Smith, quien al modo anglosajón, situó al verde como protagonista, inaugurándose en 1898. En 1921, pasada la Primera Guerra Mundial, el arquitecto escocés residente en Lomas James Smith proyectó la capilla/memorial actual en el sitio designado en el master plan original, dedicándose la misma a los vecinos caídos en la Primera Guerra Mundial, a los que se incorporaron más tarde los caídos en la Segunda.

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Fotografías y videos:

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Notas periodísticas:

La Nación, 22 de junio de 2024

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Cómo llegar